Hiena se encuentra en una habitación oscura, frente a un espejo de cuerpo entero, en la que se aprecia y sonríe.
Mente:
¿Cuantos rostros ocultas detrás de esa enorme sonrisa? se preguntaba la hiena mirándose al espejo.
Hiena:
¿Es esta sonrisa realmente mía, o es una construcción social impuesta por el miedo a no pertenecer?
Silencio:
...
Hiena:
Quizás es una barrera para que no sepan realmente quien soy...
Silencio:
...
-Hiena se miraba al espejo sonriendo, pero algo en su interior comenzó a brotar.
Hiena:
¿Porque no puedo ser como las demás hienas? Quizás debería abrazar la idea de que la sonrisa es un método escapista efectivo ante los ojos juzgadores de los demás miembros de la manada.
Silencio:
...
Hiena clava sus ojos en los ojos de su reflejo en el espejo, se produce una conexión y hiena se siente uno con el reflejo.
-Hiena entra en un estado de euforia y grita:
Hiena: ¿PORQUE SIGUES AHÍ Y NO ERES FELIZ REALMENTE? ¿A QUE SE DEBE TANTA PARAFERNALIA SOCIAL? ¿QUE BUSCAS IMITANDO A LOS DEMÁS?... Tal vez tu naturaleza individual no sea tan alegre como te quieren hacer creer... tal vez eres un mar de emociones que nunca encontró su playa.... Pero, hoy, hoy ya cambio algo, hoy me di cuenta, que estuve naufragando en la aceptación de los demás, y nunca encontré el cofre de mi tesoro, hasta hoy. Es que el jodido cofre lleva un candado y no se cual es la puta llave...
-Hiena se comienza a desesperar
Hiena: vamos, ¿que podría abrir este cofre en mi interior?, quizás algo de mi pasado sea la respuesta, o tal vez se encuentra en el futuro y aun no estoy lista para abrirlo....vamos hiena piensa.
Silencio:
...
-Hiena entre tantos pensamientos se comienza a poner ansiosa, y su proceso de pensamientos comienza a fallar, cada vez mas, simulando la falta de capacidad ram de una computadora.
Hiena: Esto, esto es nuevo...esto es...pacifico...
-Se escucha el sonido del mar, y el viento, danzando y componiendo una armonía natural.
-Hiena se relaja y comienza a sentir su cuerpo, esta abierta a sentir, lejos de pensamientos. Ya vulnerable, con los ojos cerrados dice:
Hiena: Se siente bien esto, me siento, siento mi piel y me siento por dentro, siento mi maquinaria funcionar, en hermosa coordinación.
-Hiena abre los ojos, se mira en el espejo y clava su mirada en sus ojos.
Hiena: Te perdono, me perdono. Te perdono, me perdono. Te perdono, me perdono.
-Hiena se pone vulnerable y una sonrisa honesta nace por primera vez en su rostro.
Silencio:
Gracias...
